Te dejamos el decálogo para mantener una relación de amigos con beneficios sana, productiva, respetuosa, pero, sobretodo, llena de satisfacción para ambas partes.
1. No celarás
Aquí no entran las inseguridades: él tiene su vida y tú la tuya, así que nada de ponerte de inseguro a stalkear en Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn o el álbum familiar. Son libres y sin ataduras.
2. Evitarás llevarlo a reuniones familiares
Mala idea ir acompañado de tu “amigo” a la primera comunión del sobrino o la fiesta de fin de año de la oficina. ¿Cómo lo vas a presentar?: “Hola, abuelita, esté es Perenganito, mi amantito de un ratito”. ¡No! Así que evita que los empiecen a tratar como pareja, que es precisamente lo que no estás buscando.
3. Por ningún motivo lo convertirás en tu buzón de quejas
Recuerda que lo de ustedes es solamente sexual, así que evita contarle tus traumas de la infancia, tus estreses laborales o tus aspiraciones en la vida. Se trata de pasar bien el momento, no de encontrar a tu alma gemela.
4. No pelearás
No tiene por qué llamarte para ver cómo está tu gato enfermo o regalarte tulipanes en tu cumpleaños. No olvides que este tipo de acuerdos son para evitar las presiones y las obligaciones de una relación con compromisos, así que enfócate en darle gusto al cuerpo y no te claves en cosas que no te corresponden.
5. No hablarás de exclusividad bajo ninguna circunstancia
Cada relación tiene sus propias reglas, pero lo mejor es dejar la exclusividad a un lado. Si empiezas a actuar como si se debieran algo, vas a salir perdiendo.
6. Dirás sólo la verdad y nada más que la verdad
El objetivo de tener un amigo con beneficios es satisfacer tus necesidades sexuales, así que no te quedes callado y dile qué, cómo, dónde y cuándo te gusta. Olvídate de la vergüenza. No seas ranchero.
7. Usarás protección en cada encuentro
Nunca, nunca, pero nunca ¡tendrás sexo sin protección! Ya hablamos sobre la “no exclusividad”, así como tú lo tienes a él o a ella, el susodicho en cuestión puede tener a más amiguitos cariñosos. Grábatelo bien.
8. Honrarás la discreción
Pórtate como un caballero o una damita (según sea el caso) y nada de ir pregonando que tienes una relación sin compromiso con sutanito. Olvídate del nombre de tu contraparte. No des lugar a chismes ni a que la otra persona salga quemada.
9. No cometerás actos impuros con quien no se te dé la gana.
Si un día no quieres verlo, está bien. Si mañana quieres, perfecto. Pero si te deja de gustar, déjalo. No tiene caso que sigas con alguien que ya no te ayuda a saciar tus bajos instintos.
10. Jamás de los jamases te enamores
Si esto pasa, ya valió todo. El problema es que para algunos es muy complicado no ponerse sentimental en este tipo de encuentros. Así que, si ya te conoces y eres débil, piénsalo bien antes de comenzar a jugar. Y si ya estás adentro y comienzas a verlo con ojos de borreguito a medio morir, huye lo más rápido que puedas.
Fuente: Chilango.com
1. No celarás
Aquí no entran las inseguridades: él tiene su vida y tú la tuya, así que nada de ponerte de inseguro a stalkear en Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn o el álbum familiar. Son libres y sin ataduras.
2. Evitarás llevarlo a reuniones familiares
Mala idea ir acompañado de tu “amigo” a la primera comunión del sobrino o la fiesta de fin de año de la oficina. ¿Cómo lo vas a presentar?: “Hola, abuelita, esté es Perenganito, mi amantito de un ratito”. ¡No! Así que evita que los empiecen a tratar como pareja, que es precisamente lo que no estás buscando.
3. Por ningún motivo lo convertirás en tu buzón de quejas
Recuerda que lo de ustedes es solamente sexual, así que evita contarle tus traumas de la infancia, tus estreses laborales o tus aspiraciones en la vida. Se trata de pasar bien el momento, no de encontrar a tu alma gemela.
4. No pelearás
No tiene por qué llamarte para ver cómo está tu gato enfermo o regalarte tulipanes en tu cumpleaños. No olvides que este tipo de acuerdos son para evitar las presiones y las obligaciones de una relación con compromisos, así que enfócate en darle gusto al cuerpo y no te claves en cosas que no te corresponden.
5. No hablarás de exclusividad bajo ninguna circunstancia
Cada relación tiene sus propias reglas, pero lo mejor es dejar la exclusividad a un lado. Si empiezas a actuar como si se debieran algo, vas a salir perdiendo.
6. Dirás sólo la verdad y nada más que la verdad
El objetivo de tener un amigo con beneficios es satisfacer tus necesidades sexuales, así que no te quedes callado y dile qué, cómo, dónde y cuándo te gusta. Olvídate de la vergüenza. No seas ranchero.
7. Usarás protección en cada encuentro
Nunca, nunca, pero nunca ¡tendrás sexo sin protección! Ya hablamos sobre la “no exclusividad”, así como tú lo tienes a él o a ella, el susodicho en cuestión puede tener a más amiguitos cariñosos. Grábatelo bien.
8. Honrarás la discreción
Pórtate como un caballero o una damita (según sea el caso) y nada de ir pregonando que tienes una relación sin compromiso con sutanito. Olvídate del nombre de tu contraparte. No des lugar a chismes ni a que la otra persona salga quemada.
Si un día no quieres verlo, está bien. Si mañana quieres, perfecto. Pero si te deja de gustar, déjalo. No tiene caso que sigas con alguien que ya no te ayuda a saciar tus bajos instintos.
10. Jamás de los jamases te enamores
Si esto pasa, ya valió todo. El problema es que para algunos es muy complicado no ponerse sentimental en este tipo de encuentros. Así que, si ya te conoces y eres débil, piénsalo bien antes de comenzar a jugar. Y si ya estás adentro y comienzas a verlo con ojos de borreguito a medio morir, huye lo más rápido que puedas.
Fuente: Chilango.com
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