Un británico de 72 años enseña a la Policía antidisturbios de Brasil cómo hacer frente a los manifestantes. Sus habilidades son ahora más demandadas durante el Mundial que acoge este país, que está inundado de protestas sociales.
La Policía antidisturbios brasileña no tiene la mejor reputación, ya que usa excesivamente gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes pacíficos.
Steve Costello, procedente de la ciudad de Bolton (en el noroeste del Reino Unido), lleva 20 años enseñando karate en Brasil. A mediados de 1990 fue contratado por este país para enseñar a la Policía técnicas de supresión no violentas. Antes de la Copa del Mundo le pidieron a este hombre de 72 años que diera a la Policía de São Paulo unas cuantas lecciones de karate.
"Les enseñé la técnica de Ryukyu Karate, que emplea básicamente el uso de los puntos de presión y restricciones en la lucha contra un oponente armado. Se trata de una técnica donde hay más control y busca eliminar una situación peligrosa de manera eficiente con lesiones mínimas en ambos lados, en vez de recurrir a armas letales", explicó Costello al portal estadounidense Vice.
Según el entrevistado, al personal de la Policía brasileña le gustaron las clases que le había dado el hombre de esta disciplina, ya que "es menos violenta que otras técnicas".
Entre tanto, Costello afirmó que durante los entrenamientos la Policía usó varios tipos de tambo para defenderse de los cuchillos. "Es relativamente tranquila en comparación con otras técnicas que la Policía brasileña ha utilizado antes para dispersar los disturbios y protestas", señaló.
Los últimos meses, incluyendo desde el principio del Mundial, las protestas sociales han inundado las principales ciudades de Brasil. La gente sale a las calles donde forma barricadas y marcha para mostrar su rechazo al evento deportivo. A menudo la Policía usa la fuerza para dispersar a los manifestantes.
actualidad.rt.com
La Policía antidisturbios brasileña no tiene la mejor reputación, ya que usa excesivamente gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes pacíficos.
Steve Costello, procedente de la ciudad de Bolton (en el noroeste del Reino Unido), lleva 20 años enseñando karate en Brasil. A mediados de 1990 fue contratado por este país para enseñar a la Policía técnicas de supresión no violentas. Antes de la Copa del Mundo le pidieron a este hombre de 72 años que diera a la Policía de São Paulo unas cuantas lecciones de karate.
"Les enseñé la técnica de Ryukyu Karate, que emplea básicamente el uso de los puntos de presión y restricciones en la lucha contra un oponente armado. Se trata de una técnica donde hay más control y busca eliminar una situación peligrosa de manera eficiente con lesiones mínimas en ambos lados, en vez de recurrir a armas letales", explicó Costello al portal estadounidense Vice.
Según el entrevistado, al personal de la Policía brasileña le gustaron las clases que le había dado el hombre de esta disciplina, ya que "es menos violenta que otras técnicas".
Entre tanto, Costello afirmó que durante los entrenamientos la Policía usó varios tipos de tambo para defenderse de los cuchillos. "Es relativamente tranquila en comparación con otras técnicas que la Policía brasileña ha utilizado antes para dispersar los disturbios y protestas", señaló.
Los últimos meses, incluyendo desde el principio del Mundial, las protestas sociales han inundado las principales ciudades de Brasil. La gente sale a las calles donde forma barricadas y marcha para mostrar su rechazo al evento deportivo. A menudo la Policía usa la fuerza para dispersar a los manifestantes.
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