El Ejército de Estados Unidos está trabajando en el desarrollo de balas cuyo rumbo pueda ser alterado una vez disparadas, según informaciones difundidas por el Pentágono.
La sección de investigación del Pentágono, DARPA, publicó un video en la web que muestra un proyectil de calibre 50 que es dirigido remotamente.
Según el comunicado emitido sobre el programa, llamado EXACTO, se ha desarrollado un sistema que tiene la capacidad de dirigir las balas a un lugar no previsto inicialmente por el tirador.
“Para los tiradores del Ejército es un duro reto, teniendo en cuenta el estado actual de la tecnología, dar con objetivos en movimiento en condiciones no favorables, como pueden ser los fuertes vientos que se levantan en Afganistán o los predios con mucho polvo”, dice la página web del programa.
Los objetivos, añade, deben poder ser combatidos a mayor velocidad y con mayor precisión, ya que un tiro en falso puede dejar en evidencia la presencia y la ubicación de quien lo emitió.
La sección cuenta este año con un presupuesto de 2 mil 800 millones de dólares (2 mil 100 millones de euros).
Fuente: El Universal
La sección de investigación del Pentágono, DARPA, publicó un video en la web que muestra un proyectil de calibre 50 que es dirigido remotamente.
Según el comunicado emitido sobre el programa, llamado EXACTO, se ha desarrollado un sistema que tiene la capacidad de dirigir las balas a un lugar no previsto inicialmente por el tirador.
“Para los tiradores del Ejército es un duro reto, teniendo en cuenta el estado actual de la tecnología, dar con objetivos en movimiento en condiciones no favorables, como pueden ser los fuertes vientos que se levantan en Afganistán o los predios con mucho polvo”, dice la página web del programa.
Los objetivos, añade, deben poder ser combatidos a mayor velocidad y con mayor precisión, ya que un tiro en falso puede dejar en evidencia la presencia y la ubicación de quien lo emitió.
La sección cuenta este año con un presupuesto de 2 mil 800 millones de dólares (2 mil 100 millones de euros).
Fuente: El Universal