Científicos suecos han propuesto un nuevo método de tratamiento del cáncer: bloquear la proteína que protege a las células cancerosas.
Los investigadores del Instituto Karolinska (Suecia) han hallado que la proteína MTH1 desempeña el papel de defensor de las células malignas, que les ayuda a lidiar el estrés oxidativo provocado por la formación de especies reactivas de oxígeno. La proteína captura los nucleótidos oxidados y evita que se unan con la molécula de ADN. Como resultado, las células de cáncer evitan la destrucción de su ADN y con esto la muerte que abre el camino a su reproducción.
De acuerdo con el estudio publicado en la revista 'Nature', el bloqueo de MTH1 permite privar a las células cancerígenas de esa protección esencial y conduce a la destrucción del tumor maligno. Los investigadores han propuesto inhibidores (sustancias que disminuyen o previenen cualquier reacción química) de la proteína que actúan en todas las células cancerosas.
Al principio el desarrollo de los métodos de tratamiento de la oncología estuvo encaminado hacia la terapia dirigida, que a su vez se centra en mutaciones genéticas únicas observadas en las células cancerosas. De todos modos, el tumor continúa adaptándose, causando mutaciones nuevas, más resistentes a los tratamientos.
A diferencia de los tratamientos utilizados anteriormente, los inhibidores de MTH1 son capaces de trabajar en varias células cancerosas, con independencia de las mutaciones que ocurran en ellas.
Los investigadores del Instituto Karolinska (Suecia) han hallado que la proteína MTH1 desempeña el papel de defensor de las células malignas, que les ayuda a lidiar el estrés oxidativo provocado por la formación de especies reactivas de oxígeno. La proteína captura los nucleótidos oxidados y evita que se unan con la molécula de ADN. Como resultado, las células de cáncer evitan la destrucción de su ADN y con esto la muerte que abre el camino a su reproducción.
De acuerdo con el estudio publicado en la revista 'Nature', el bloqueo de MTH1 permite privar a las células cancerígenas de esa protección esencial y conduce a la destrucción del tumor maligno. Los investigadores han propuesto inhibidores (sustancias que disminuyen o previenen cualquier reacción química) de la proteína que actúan en todas las células cancerosas.
Al principio el desarrollo de los métodos de tratamiento de la oncología estuvo encaminado hacia la terapia dirigida, que a su vez se centra en mutaciones genéticas únicas observadas en las células cancerosas. De todos modos, el tumor continúa adaptándose, causando mutaciones nuevas, más resistentes a los tratamientos.
A diferencia de los tratamientos utilizados anteriormente, los inhibidores de MTH1 son capaces de trabajar en varias células cancerosas, con independencia de las mutaciones que ocurran en ellas.