La Marina estadounidense comenzará las pruebas de un cañón de riel instalado en un buque en 2016. Si la Armada termina adoptándolo, será un arma capaz de transformar las flotas modernas.
La Marina de EE.UU. ha financiado dos prototipos de cañones electromagnéticos desarrollados por las empresas General Atomics y BAE Systems. Para la segunda fase del proyecto, durante la cual el cañón será sometido a pruebas a máxima cadencia de fuego, ha sido seleccionada la pieza de BAE Systems, que disparará potentes proyectiles de 457 mm de largo, según el Departamento de Defensa estadounidense.
El cañón de riel usa para acelerar sus proyectiles la fuerza de Lorentz y la vaporización explosiva de metal bajo la influencia de corrientes de gran fuerza. Actualmente, el prototipo de cañón de riel puede disparar proyectiles de 23 kilogramos con una velocidad inicial de 2200 m/s, con lo cual se logra un alcance de 160 kilómetros.
Los proyectiles de un cañón de estas características costarán alrededor de 25.000 dólares, es decir mucho, más baratos en comparación con el enorme coste de los misiles, de 500.000 a 1.500.000 dólares. Además esta arma no necesita cargas de pólvora, lo que aumenta considerablemente la capacidad de supervivencia de la embarcación y los marineros. Otra ventaja es que el cañón podría ser atendido por un solo artillero.
De momento los ingenieros de la Marina han puesto a prueba el cañón de riel en tierra. Los ensayos de la futurista arma en mar comenzarán en el buque de alta velocidad JHSV Millinocket en 2016. Además, se hará una demostración del arma en julio de 2014 en la base naval de San Diego.
Todo parece indicar que en la década de los años 20 de nuestro siglo los buques de la Armada estadounidense comenzarán a dotarse activamente de cañones electromagnéticos capaces de cumplir una amplia gama de misiones, tanto destruir objetivos en tierra como interceptar ojivas de misiles balísticos.
La Marina de EE.UU. ha financiado dos prototipos de cañones electromagnéticos desarrollados por las empresas General Atomics y BAE Systems. Para la segunda fase del proyecto, durante la cual el cañón será sometido a pruebas a máxima cadencia de fuego, ha sido seleccionada la pieza de BAE Systems, que disparará potentes proyectiles de 457 mm de largo, según el Departamento de Defensa estadounidense.
El cañón de riel usa para acelerar sus proyectiles la fuerza de Lorentz y la vaporización explosiva de metal bajo la influencia de corrientes de gran fuerza. Actualmente, el prototipo de cañón de riel puede disparar proyectiles de 23 kilogramos con una velocidad inicial de 2200 m/s, con lo cual se logra un alcance de 160 kilómetros.
Los proyectiles de un cañón de estas características costarán alrededor de 25.000 dólares, es decir mucho, más baratos en comparación con el enorme coste de los misiles, de 500.000 a 1.500.000 dólares. Además esta arma no necesita cargas de pólvora, lo que aumenta considerablemente la capacidad de supervivencia de la embarcación y los marineros. Otra ventaja es que el cañón podría ser atendido por un solo artillero.
De momento los ingenieros de la Marina han puesto a prueba el cañón de riel en tierra. Los ensayos de la futurista arma en mar comenzarán en el buque de alta velocidad JHSV Millinocket en 2016. Además, se hará una demostración del arma en julio de 2014 en la base naval de San Diego.
Todo parece indicar que en la década de los años 20 de nuestro siglo los buques de la Armada estadounidense comenzarán a dotarse activamente de cañones electromagnéticos capaces de cumplir una amplia gama de misiones, tanto destruir objetivos en tierra como interceptar ojivas de misiles balísticos.