El asunto de Flappy Bird, el juego cuyo salto de popularidad ha podido con la moral de su creador, está llegando a límites insospechados. Como el juego ya no se puede descargar de la App Store, algunas personas están subastando en eBay sus propios iPhone con la aplicación instalada. Y de momento las pujas rozan ya los 100.000 dólares.
No, mi dislexia no me ha hecho poner ceros de más. El usuario de eBay pindrus tiene a subasta su propio teléfono y la puja actual está ya por los 99.900 dólares a partir de una puja inicial de 650 dólares. Alguien está muy, pero que muy picado con el Flappy Bird. O eso o es un coleccionista obsesivo que no quiere perderse tener una aplicación tan popular y fugaz. La subasta termina en seis días.
Los desarrolles también intentan sacar partido rápidamente de este fenómeno: desde que se supo que el desarrollador retiraría el Flappy Birds original han empezado a aparecer clones del juego para intentar desviar toda la atención de los jugadores. Tenemos por ejemplo aFlappy Bee, que es básicamente lo mismo que Flappy Bird pero con una abeja en vez de un pájaro; o a Fluffy vs Flappy Birds que intenta enriquecer el juego con más opciones.
Es una lástima que Dong Nguyen, el creador del juego original, haya decidido retirarlo aún obteniendo 50.000 dólares diarios. Ya vimos cómo decía por Twitter que esto estaba acabando con su vida “simple” y que no podía aguantarlo más, pero esto está dando origen a otras locuras como las subastas que hemos visto. Hay que ver lo que unos simples piques con un pájaro pueden provocar, ¿verdad? Si lo llego a saber no elimino el juego de mi iPhone.
Vía | Xataka México
No, mi dislexia no me ha hecho poner ceros de más. El usuario de eBay pindrus tiene a subasta su propio teléfono y la puja actual está ya por los 99.900 dólares a partir de una puja inicial de 650 dólares. Alguien está muy, pero que muy picado con el Flappy Bird. O eso o es un coleccionista obsesivo que no quiere perderse tener una aplicación tan popular y fugaz. La subasta termina en seis días.
Los desarrolles también intentan sacar partido rápidamente de este fenómeno: desde que se supo que el desarrollador retiraría el Flappy Birds original han empezado a aparecer clones del juego para intentar desviar toda la atención de los jugadores. Tenemos por ejemplo aFlappy Bee, que es básicamente lo mismo que Flappy Bird pero con una abeja en vez de un pájaro; o a Fluffy vs Flappy Birds que intenta enriquecer el juego con más opciones.
Es una lástima que Dong Nguyen, el creador del juego original, haya decidido retirarlo aún obteniendo 50.000 dólares diarios. Ya vimos cómo decía por Twitter que esto estaba acabando con su vida “simple” y que no podía aguantarlo más, pero esto está dando origen a otras locuras como las subastas que hemos visto. Hay que ver lo que unos simples piques con un pájaro pueden provocar, ¿verdad? Si lo llego a saber no elimino el juego de mi iPhone.
Vía | Xataka México