El reflejo de la luz solar de uno de los rascacielos de cristal más altos de Londres ha 'derretido' un lujoso automóvil que se encontraba aparcado frente al edificio, según denunció su propietario.
El edificio culpable es conocido como el ‘Walkie Talkie’, que se encuentra aún en construcción en el distrito financiero la capital británica. Martin Lindsay dijo a la BBC que dejó su vehículo, un Jaguar, aparcado alrededor de dos horas frente a la edificación.
"Iba caminando de regreso por la acera cuando vi a un fotógrafo tomando fotos de mi coche y pregunté, ¿Qué pasa?", señaló Lindsay. "El fotógrafo me preguntó ¿Has visto este coche? El dueño no estará contento".
Varias partes del automóvil, como el retrovisor y una ventanilla habían sufrido grandes daños, relató el propietario.
"Nunca creería que algo como esto pudiera pasar. Podría ser peligroso. Imagínese lo que pasaría si el Sol se refleja en alguna parte del cuerpo [humano]", agregó el hombre a la cadena de noticias británica.
Los arquitectos del edificio admiten la existencia del problema, causado por el "intenso" reflejo de la luz cuando del Sol alcanza una altura determinada, por lo que ya "están buscando soluciones para este inconveniente".
Por el momento, se ha decidido clausurar varias plazas de aparcamiento en la zona para evitar casos como el del 'Jaguar derretido', y la compañía constructora dejó sobre el parabrisas del automóvil de Lindsay una nota que rezaba: "Su coche se ha estropeado, ¿podría llamarnos?".
El edificio culpable es conocido como el ‘Walkie Talkie’, que se encuentra aún en construcción en el distrito financiero la capital británica. Martin Lindsay dijo a la BBC que dejó su vehículo, un Jaguar, aparcado alrededor de dos horas frente a la edificación.
"Iba caminando de regreso por la acera cuando vi a un fotógrafo tomando fotos de mi coche y pregunté, ¿Qué pasa?", señaló Lindsay. "El fotógrafo me preguntó ¿Has visto este coche? El dueño no estará contento".
Varias partes del automóvil, como el retrovisor y una ventanilla habían sufrido grandes daños, relató el propietario.
"Nunca creería que algo como esto pudiera pasar. Podría ser peligroso. Imagínese lo que pasaría si el Sol se refleja en alguna parte del cuerpo [humano]", agregó el hombre a la cadena de noticias británica.
Por el momento, se ha decidido clausurar varias plazas de aparcamiento en la zona para evitar casos como el del 'Jaguar derretido', y la compañía constructora dejó sobre el parabrisas del automóvil de Lindsay una nota que rezaba: "Su coche se ha estropeado, ¿podría llamarnos?".