Graciliana López, una mujer de pésima vista, sintió un resplandor en los anteojos y al mirar con detención hacia lo alto, vio una imagen de la Virgen del Carmen. La imagen es una mata de cebolla que apareció en un madero en el estacionamiento de la municipalidad de Fusagasugá', según relató el encargado del lugar Germán Vargas a El Colombiano. "Lo asombroso es que esa mata no se ablanda ni se pudre, parece un cristal". Agrega que no quiere que la gente asista a ver la mata y prefiere el anonimato.
-¿Me deja subir a tomar unas foticos? -le pidió Álvaro García. "Ahora no le puedo colaborar porque todos van a querer montarse y ya me rompieron un par de tejas", le respondió Germán. También regañó al que quiso escarbar a ver qué encontraba en la raíz. Decomisó la varita con que un niño quería tocarla. Prohibió el ingreso de otros fotógrafos.
El párroco del barrio, Édgar Cepeda, no quiere habla y el obispo Héctor López ironizó; "Si está sobre un pedazo de madera en el techo, la Santísima Virgen tiene vocación de malabarista. Es ridículo pensar que en ese bulto, en ese vegetal silvestre está la auténtica Virgen María. Solo son cosas de la gente a la que no hay que darle importancia",
El párroco del barrio, Édgar Cepeda, no quiere habla y el obispo Héctor López ironizó; "Si está sobre un pedazo de madera en el techo, la Santísima Virgen tiene vocación de malabarista. Es ridículo pensar que en ese bulto, en ese vegetal silvestre está la auténtica Virgen María. Solo son cosas de la gente a la que no hay que darle importancia",
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