El proyecto, pensado en principio para las ciudades de Londres y Nueva York, podrá desarrollarse en cualquier ciudad del mundo y constará de trenes que se prevé cubran una distancia promedio de casi 500 kilómetros en 30 minutos.
La tecnología de hiper velocidad vertical pretende sustituir a las emblemáticas estaciones de tren existentes y crear "nuevos puntos de conexión clave para el intercambio de personas y bienes", aseguran sus creadores.
Mientras el tren se aproxima al rascacielos, pasando de una formación horizontal a la vertical para ascender por la fachada, los vagones pivotarán como si de una "gran rueda" se tratara, permitiendo a los pasajeros permanecer en posición vertical contemplando el paisaje urbano.
Los vagones se apoyarán sobre una estructura magnética situada a cada lado de los mismos, lo que elimina la necesidad de raíles por debajo y permite conectar al tren y sus pasajeros con la torre.
La tecnología de hiper velocidad vertical pretende sustituir a las emblemáticas estaciones de tren existentes y crear "nuevos puntos de conexión clave para el intercambio de personas y bienes", aseguran sus creadores.
Mientras el tren se aproxima al rascacielos, pasando de una formación horizontal a la vertical para ascender por la fachada, los vagones pivotarán como si de una "gran rueda" se tratara, permitiendo a los pasajeros permanecer en posición vertical contemplando el paisaje urbano.
Los vagones se apoyarán sobre una estructura magnética situada a cada lado de los mismos, lo que elimina la necesidad de raíles por debajo y permite conectar al tren y sus pasajeros con la torre.