Un nuevo informe de los Centros para el control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) revela una preocupante tendencia: una de cada 8 mujeres bebe demasiado, al menos tres veces al mes.
En el caso de las mujer, se define como "beber pesado" cuando se toma en una sola ocasión —una noche, una fiesta, una salida al bar— cuatro bebidas o más. Y puede tratarse de cualquier tipo de alcohol: cervezas, tragos, copas de vino o licores.
Según el reporte de los CDC, el grupo de mujeres que más bebe se ubica entre los 18 y 34 años, y en aquéllas que tienen mejores salarios, de $75 mil anuales o más.
Otra revelación preocupante es que también toman mucho las adolescentes: una de cada 5 de las que asisten a la escuela secundaria.
David Jemigan, director del Center on Alcohol Marketing and Youth en la Johns Hopkins University, explica que las mujeres deberían seguir los lineamientos federales, que indican que se debe tomar más de un trago al día.
Los CDC alertan que este tipo de consumo elevado abre las puertas para las mujeres a enfermedades de trasmisión sexual, males cardíacos y cáncer de seno. Ni que hablar si se trata de una embarazada. El riesgo para el feto es desde malformaciones hasta trastornos cognitivos y del desarrollo.
Fuente:Mas Informacion... -->
En el caso de las mujer, se define como "beber pesado" cuando se toma en una sola ocasión —una noche, una fiesta, una salida al bar— cuatro bebidas o más. Y puede tratarse de cualquier tipo de alcohol: cervezas, tragos, copas de vino o licores.
Según el reporte de los CDC, el grupo de mujeres que más bebe se ubica entre los 18 y 34 años, y en aquéllas que tienen mejores salarios, de $75 mil anuales o más.
Otra revelación preocupante es que también toman mucho las adolescentes: una de cada 5 de las que asisten a la escuela secundaria.
David Jemigan, director del Center on Alcohol Marketing and Youth en la Johns Hopkins University, explica que las mujeres deberían seguir los lineamientos federales, que indican que se debe tomar más de un trago al día.
Los CDC alertan que este tipo de consumo elevado abre las puertas para las mujeres a enfermedades de trasmisión sexual, males cardíacos y cáncer de seno. Ni que hablar si se trata de una embarazada. El riesgo para el feto es desde malformaciones hasta trastornos cognitivos y del desarrollo.
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