Mathew Taylor, un británico de 31 anos, sufrió un accidente de moto en Bali, el lugar en el que reside, que le dejó en coma durante diez largos meses.
La familia, tras el accidente, le trasladó a Inglaterra y allí una llamada de su novia Handayani Nurul, ha conseguido que, por primera vez aparezca algún signo de vida: “Las lagrimas empezaron a caer por su cara. Fue fantástico”, explica su padrastro. “Ella le preguntó algo y el respondió con un silencioso sí”.
La familia, tras el accidente, le trasladó a Inglaterra y allí una llamada de su novia Handayani Nurul, ha conseguido que, por primera vez aparezca algún signo de vida: “Las lagrimas empezaron a caer por su cara. Fue fantástico”, explica su padrastro. “Ella le preguntó algo y el respondió con un silencioso sí”.
La pareja planeaba casarse, pero Matthew sufrió el accidente de moto en julio de 2011. Además de fracturarse el cráneo, se le tuvo que reconstruir la cuenca de un ojo con hueso tomado de su cadera. Sin seguro médico, su familia tuvo que reunir 100.000 libras (unos 125.000 euros) para que fuera tratado en Bali.
A pesar de la alegría de su familia, los médicos han indicado que Matthew podría no recuperarse completamente. Si bien, señalan, cada caso es diferente. “Todavía está en coma, pero mueve la mano izquierda y la derecha cuando el teléfono suena. Estamos contentos de que se vaya recuperando” dice la familia.
A pesar de la alegría de su familia, los médicos han indicado que Matthew podría no recuperarse completamente. Si bien, señalan, cada caso es diferente. “Todavía está en coma, pero mueve la mano izquierda y la derecha cuando el teléfono suena. Estamos contentos de que se vaya recuperando” dice la familia.