La preocupación por las prótesis mamarias de la empresa francesa PIP se extiende por Latinoamérica, una zona donde se ha vendido un gran número de este tipo de implantes. En concreto, más del 50% de las exportaciones de prótesis mamarias de PIP fue durante varios años a estos países.
A diferencia de Francia, donde se ha recomendado a todas las mujeres que se retiren de forma preventiva sus prótesis, en Brasil, Argentina, Chile y otros países latinoamericanos las autoridades han llamado a la calma y han pedido a las usuarias que presenten problemas que contacten con sus cirujanos o con las autoridades sanitarias.
Se calcula que unas 300.000 personas en el mundo usan las prótesis mamarias fabricadas por la empresa francesa, que llegó a ser la tercera más importante del mundo en ese sector, pero no hay cifras oficiales. Además, ahora se ha descubierto que podrían haberse comercializado con un nombre diferente en otros países, como ha ocurrido en Holanda.
Algunas fuentes han cifrado en unas 30.000 las francesas, en 13.000 las argentinas, en 25.000 las brasileñas, en 350 las chilenas y menos de 100 las panameñas que llevan en sus cuerpos esos productos.
A diferencia de Francia, donde se ha recomendado a todas las mujeres que se retiren de forma preventiva sus prótesis, en Brasil, Argentina, Chile y otros países latinoamericanos las autoridades han llamado a la calma y han pedido a las usuarias que presenten problemas que contacten con sus cirujanos o con las autoridades sanitarias.
Se calcula que unas 300.000 personas en el mundo usan las prótesis mamarias fabricadas por la empresa francesa, que llegó a ser la tercera más importante del mundo en ese sector, pero no hay cifras oficiales. Además, ahora se ha descubierto que podrían haberse comercializado con un nombre diferente en otros países, como ha ocurrido en Holanda.
Algunas fuentes han cifrado en unas 30.000 las francesas, en 13.000 las argentinas, en 25.000 las brasileñas, en 350 las chilenas y menos de 100 las panameñas que llevan en sus cuerpos esos productos.