Cuatro estaciones
ya sea en primavera, verano, otoño, o invierno
, sin ti me han calcinado… las fauces del infierno
porque después de amarte… ya no conozco el olvido..
No hay limite al quererte, ni estación en el tiempo
al verte, tu presencia. Llena intimo lugar
con pétalos de rosas. vi ornar mi firmamento
y de estrellas el camino….donde solías pasar.
Construí un arcoiris con las flores silvestres
mas hermosas que crecen en abril, mayo y junio
hechos de una amalgama de asteroides celestes
con magia de tus ojos…que borran mi infortunio.
Julio, agosto y septiembre. Contigo en el verano
no temeré borrascas o un mar enardecido
enfrentare la furia, de huracanados agitados
porque en todo momento, estarás tu conmigo
En octubre y noviembre que el otoño se acerca
hay recambio en las hojas después de madurar
comienzan los incendios, que devoran la yesca
pero el amor sublime de nuestros corazones
tiene inmensas razones
para nunca apagar.
En diciembre y enero, de febrero hasta marzo
de las lluvias caídas, vamos a refugiar
te cuidare dormida, como siempre en mis brazos
porque se que tu sueñas, con dios en su regazo
y confías en que siempre…siempre te voy a amar.
Dr. Rodríguez Santos
Imbert, 30 de abril 2011.
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